Con 77 votos a favor, 10 en contra y tres abstenciones, el Pleno del Congreso aprobó la Moción de Orden del Día 16090, que declara al Tren de Aragua como organización terrorista. La medida se fundamenta en la estructura jerárquica, métodos violentos y acciones desestabilizadoras de este grupo contra el orden constitucional del país.
La iniciativa, impulsada por la bancada de Fuerza Popular y respaldada por congresistas de diversas agrupaciones, también establece la creación de una Comisión Especial Multipartidaria. Este grupo de trabajo, con una vigencia de 180 días hábiles, coordinará con el Ministerio del Interior y otras entidades estatales la lucha contra el crimen organizado. Asimismo, se exhorta al Ministerio de Relaciones Exteriores a gestionar ante organismos internacionales la designación del Tren de Aragua como una organización terrorista transnacional.
Durante el debate, algunos legisladores cuestionaron la efectividad de la moción, argumentando que se requieren estrategias concretas para enfrentar la criminalidad. Mientras que congresistas como Alejandro Cavero y Susel Paredes coincidieron en la necesidad de combatir técnicamente al grupo delictivo, otros, como Alex Flores y Guillermo Bermejo, señalaron que la declaración no tendría impacto práctico en la lucha contra la delincuencia.